Redacción – La confluencia del agua de las primeras lluvias con el aceite y combustible, acumulado en las carreteras durante todo el verano, generan una “película jabonosa” que aumenta el riesgo de accidentes en carretera por derrape, tanto en carros como en motocicletas.

Esta es solo una de las situaciones que advierte la Dirección de Tránsito, a propósito de las lluvias que se han presentado en diferentes lugares del país en estos primeros días de abril.

El Director de la Policía de Tránsito, Comisario Mario Calderón, puntualizó que dentro de las principales conductas que influyen en accidentes, tanto leves como graves, es que producto de la lluvia, se viaja más lento, entonces aumentan los tiempos de traslado. Como consecuencia, nadie quiere ceder espacio en la carretera y para que nadie se “cuele”, muchos conductores se pegan mucho al vehículo de adelante, para reducir espacio, algo que aumenta los choques leves.

“Son choques sin mayor daño material o personal, son los típicos roces entre bumpers. Pese a ello, no utilizan la conciliación y llaman a la Policía de Tránsito, lo que obliga a desplazar oficiales de sitios donde están regulando para atender el choque. Por otro lado, al esperar la llegada del oficial, y no conciliar, dejan los vehículos en la carretera y eso también genera congestionamiento. Solo en el primer trimestre del 2018 hemos atendido 21.343 accidentes, esa cifra equivale a unos 10 accidentes por hora, uno cada 6 minutos”, explicó Calderón.

Verificar que el aire acondicionado y las escobillas del vehículo estén en buen estado, para evitar empañamiento y falta de visibilidad por lluvia, respectivamente, son consejos de las autoridades de Tránsito.

Revisar que todas las luces funcionen adecuadamente permite evidenciar la presencia de otros vehículos en las vías.

No esperar a que anochezca para encender las luces es vital, pues según las condiciones climáticas a mitad de la tarde la oscuridad puede ser importante, producto de la lluvia y hasta de la neblina.