• Es el primer tratado internacional sobre este delito

Redacción – El Ministerio de Salud Pública (MSP) anuncia la unión de Costa Rica al Convenio de Santiago de Compostela, contra el tráfico y el comercio de órganos humanos. Este se firmó en la ciudad española en el 2015 y ahora tiene el primer país no europeo que se adhiere a este.

Este se convierte en el primer tratado internacional para combatir este tipo de delitos lo que supone un paso decisivo en la lucha contra el tráfico de órganos en el mundo. Quien lo firmó fue el embajador de Costa Rica en Francia, Gabriel Macaya, ante la Secretaria General Adjunta del Consejo de Europa, Gabriella Battaini-Dragoni.

Otro de sus propósitos es la protección de las víctimas y el fomento de la cooperación nacional e internacional en este ámbito.

El tratado solicita a todos los gobiernos dentro de la firma, la tipificación de los delitos de la extracción de órganos sin el consentimiento libre informado y el consentimiento específico del donante vivo o fallecido; las situaciones en las que, a cambio de la extracción de órganos, el donante vivo o un tercero reciban un beneficio económico o una ventaja comparable; o cuando a cambio de la extracción de órganos de un donante fallecido, una tercera parte reciba un beneficio económico o una ventaja comparable. También contempla medidas de protección, compensación y asistencia a las víctimas en su recuperación física, psicológica y social; y medidas de prevención para asegurar la transparencia y el acceso equitativo a los servicios de trasplante.

«Esto es un importante paso, no sólo para la salud de las personas, sino porque cierra puertas a prácticas delictivas que ponen en riesgo la salud pública y privada. En Costa Rica, se cuenta con la Secretaría Ejecutiva Técnica de Donación y Trasplante de Órganos y Tejidos, que regula las actividades relacionadas con la obtención y utilización clínica de órganos y tejidos humanos, incluidos la donación, la extracción, la preparación, el transporte, la distribución, el trasplante y su seguimiento para fines terapéuticos», agregó la Ministra de Salud, Karen Mayorga.