Redacción- La época navideña se acerca y para muchos la navidad ya empezó, extendiéndose hasta principios del próximo año. Desde decorar su casa o lugar de trabajo, hasta empezar a deleitarse con los platillos típicos de fin de año, muy propios de nuestra gastronomía.

Es imposible para algunos, por ejemplo, decirle que no a un tamal de cerdo, un queque navideño o un rompope bien dulce, con o sin alcohol, lo cual es razonable. Sin embargo, el no consumir estos alimentos de forma moderada trae consigo un prejuicio para la salud dado el aumento en la ingesta de azúcares, grasas y otros alimentos.

Realizar alguna actividad física de forma periódica es necesario y saludable no solo a fin de año cuando tendemos a “pecar” un poco más con lo que comemos, no obstante, particularmente en esta época es imperativo no bajar la guardia cuando se trata de salir a correr, andar en bicicleta o ir al gimnasio, por ejemplo, ya que, de no ser así, la estimación de ganancia de peso para una persona sedentaria es de aproximadamente 20 libras en 10 años, solo en la temporada navideña.

Como se menciona antes, la disciplina en el ejercicio nos puede ayudar a quemar esas calorías que ganamos al ingerir algunos alimentos de temporada no tan balanceados nutricionalmente hablando, que al mismo tiempo si se consumen de forma responsable tampoco tienen por qué afectar nuestra salud.

“Justamente el aumento de consumo de calorías y la disminución del gasto energético es lo que provoca el aumento de peso; y si a eso le sumamos los niveles de estrés y mayor consumo de grasas y azúcares, todo puede llevar a la activación de varias hormonas, entre ellas la insulina y otras que incrementan el apetito y la acumulación de grasa corporal”, explicó Adriana Alvarado, nutricionista.

Bajo ese contexto, Alvarado recomienda que la persona “debe ajustarse lo más que se pueda a su rutina normal y buenos hábitos de alimentación. No es necesario privarse de las comidas típicas de la época, teniendo presente que se pueden disfrutar con moderación, alternar días y consumir porciones pequeñas”, enfatizando en que la restricción más bien provoca caer en tentación de comer en exceso.

La nutricionista Alvarado menciona 13 consejos útiles para disfrutar de forma adecuada la temporada navideña sin preocupaciones

  1. Trate de mantenerse activo; caminar como mínimo 60 minutos diarios.
  2. No se salte las comidas. Lo mejor es que haga una merienda pequeña antes de la cena o
  3. Inicie el día con un desayuno que tenga dos huevos, ya que éste brinda saciedad y acelera el metabolismo hasta en un 25%.
  4. Mueva los carbohidratos (o harinas) del día para la cena o fiesta. Esto quiere decir que en el desayuno, por ejemplo, coma sólo el omelet y al almuerzo opte por la ensalada, vegetales y porción de proteína (pollo, carne o pescado), sin arroz ni frijoles. Esto porque por lo general los postres, alcohol y comidas navideñas, son altas en carbohidratos. A esto se le llama
  5. Hidrátese bien para evitar la retención de líquidos y la ansiedad.
  6. Si va tomar alcohol, trate que cada trago le dure 1 hora, y alterne con 1 vaso de
  7. Use un App en su teléfono móvil para apoyarse en consumo de calorías y cantidad de grasa y azúcar que tienen muchas de las preparaciones de esta época. Esto le ayudará a estar consciente y consumir porciones más pequeñas
  8. Planee sus comidas del día.
  9. Si va a comer de un buffet, sírvase de último para no tener tentación de
  10. En la oficina, tenga a mano frutas y snacks saludables, para no caer en la tentación de pecar con golosinas y repostería.
  11. Sírvase siempre las ensaladas y carnes, con el aderezo y salsas al lado (recuerde que muchas son altas en grasa).
  12. Si va a comer postre, trate de disminuir las grasas y carbohidratos del plato
  13. Evite los cócteles y licores cremosos, los cuales pueden tener hasta 327 calorías según su clasificación. Opte por vino tinto, licores claros con bebidas light o sin azúcar como soda.