Redacción- Tras la reforma parcial a la Ley de Tránsito, que entró a regir el pasado 17 de julio, 18 conductores recibieron una sanción por negarse a realizar la prueba de expiración de aire, con la que se pretendía determinar si conducían bajo los efectos del alcohol.

La reforma establece una sanción de ¢306.850,21, es decir, una multa tipo A, para las personas que no accedan a realizarse la prueba. Adicionalmente, acumulan 6 puntos en su licencia de conducir, lo que los obligará a realizar un curso de sensibilización y reeducación vial, para poder renovar la licencia de conducir.

Este curso, impartido por la Dirección General de Educación Vial, es modalidad presencial, asistiendo a clases cuatro días, en las mañanas o en las tardes, de lunes a jueves, y el viernes deberán realizar la prueba, que tendrán que ganar con, al menos, un 80.

En los casos de conductores novatos, que tengan su licencia por primera vez, la acumulación de estos puntos les suspende la licencia de inmediato por un año, lo que les impide conducir legalmente por ese tiempo.

El Director de la Policía de Tránsito, Comisario Mario Calderón, resaltó que entre enero y setiembre se realizaron 19.814 pruebas de expiración de aire, para detectar conductores bajo las influencias del licor. De ese total, señaló que 161 conductores recibieron una sanción de ¢306.850,21 y acumularon 6 puntos al dar positiva la prueba con niveles elevados.

Otros 581 personas también dieron positivo, pero su nivel de alcohol en el cuerpo era tan bajo que no implicó una sanción.

Por otro lado, Calderón destacó los 1.577 conductores que terminaron a las órdenes del Ministerios Público, por conducir con niveles excesivos de alcohol en el organismo, según los parámetros definidos en la Ley de Tránsito.

“Hemos hecho un trabajo constante, en el tema del alcohol al volante. Son cerca de 73 pruebas por día, en promedio, cada día del año. Es importante detallar que apenas el 12% de todas las pruebas dieran positivo, entre pruebas que no ameritan sanción, que implican multa o remisión de la persona al Ministerio Público, porque significa que casi el 90% de la población sometida a prueba estaba absolutamente sobria al momento de conducir. Esto habla bien del comportamiento de las personas, cómo se ha ido mejorando en este tema, sea por conciencia o por sanción”, reseñó el Comisario.

En lo que va del año, han muertos 18 personas en accidentes vinculados al alcohol al volante, lo que la ubica como la quinta causa de muerte en carretera.