Redacción Estudiar en el extranjero es una de las experiencias más enriquecedoras que un joven pueda tener. Por eso, cada vez es más adolescentes están optando por la posibilidad de descubrir los sistemas educativos que otros colegios tienen que ofrecer.

Los cuestionamientos son regularmente ¿Cómo va a abandonar su país siendo menor de edad? ¿Cómo van a estudiar alejados de su familia? Pues, respuestas existen miles pero las más comunes son: -Conocer nuevos lugares, culturas, hacer amigos, fue la mejor decisión que pudimos tomar mi familia y yo.  -Aprendí a hablar más idiomas, maduré mucho y ahora sé que quiero estudiar más adelante.

En Costa Rica los estudiantes se van de intercambios cada vez a menor edad, todo en busca de aventura y oportunidad. Ese es el caso de José Miguel Argueta y Mark Anthony Dunn, quienes apenas con 16 años tomaron la decisión de ir a China a estudiar durante seis meses.

“Si tuviera que describir mi experiencia en China en una palabra, usaría la palabra “única”. Al principio tenía miedo al viajar al otro lado del mundo, pero eso se me pasó rápidamente”, expresó José Miguel Argueta.

Mientras que Mark Anthony Dunn explicó “Esta oportunidad, cambió mi vida para siempre, y para bien. Mi consejo es aceptar estas oportunidades, ya que es una de las cosas que más lo hacen crecer a uno como persona”.

“Aprendí a ser más independiente, a controlar el dinero, a moverme por una ciudad tan grande como Shanghái sin problema”, comentó Mark Anthony Dunn.

José por su lado, manifestó “El sentimiento de independencia que uno siente al hacer eso (estudiar en el extranjero) a tan temprana edad, es increíble”.

Todo cambio requiere un tiempo para acoplarse, más si se está del otro lado del mundo. José mencionó que en los primeros meses le fue difícil acoplarse, pero que lo logró y Mark por su parte explicó que el primer mes fue bastante duro, que se sentía demasiado lejos de Costa Rica, amigos y familia, pero que hablando con los amigos que hizo, para el segundo mes, ya no se quería venir.

La organización francesa Nacel, ha cambiado la vida de muchos adolescentes de Costa Rica, adolescentes que dejan atrás sus temores, familia y amigos, para vivir una aventura que nunca olvidarán.