Redacción- Cuando ya ningún romero transitaba por la cuesta de Ochomogo, los oficiales de la Fuerza Pública a cargo de resguardar la integridad de quienes realizan su peregrinación hasta Cartago, notaron la presencia de una adulta mayor por el sitio pasada la medianoche de este sábado.

La señora, de nombre María Mesén, de 83 años, venía desde Barrio la Pithaya en San José, acompañada de tan solo un bastón para llegar hasta la Basílica de Los Ángeles en la Vieja Metrópoli.

Según lo que le contó a los policías, esto lo estaba haciendo con el fin de agradecer por los resultados de un examen de cáncer efectuado a su hija, el cual salió negativo.

De acuerdo con lo informado por el comisionado Enrique Arguedas, director regional de la Fuerza Pública de Cartago, al notar que ninguna otra persona viajaba con ella, el propio subdirector regional, el comandante Steven Trejos, se encargó de organizar la seguridad de doña María hasta la Basílica.

Con tal fin, el comandante Trejos ordenó que la ciudadana fuese acompañada por los distintos grupos de oficiales a cargo de los diversos tramos de la carretera, de modo tal que cada cierta distancia un nuevo grupo de policías se iba rotando en la misión de acompañar a doña María hasta que llegara sana y salva a Cartago.

Arguedas detalló que cerca de la las 5 de la mañana de este domingo, por fin doña María estaba llegando a la Basílica y, una vez que ella efectuó su acto de oración en el templo, los policías la llevaron a las oficinas de la Dirección Regional de la Fuerza Pública, donde pudo descansar y tomarse un cafecito con los policías antes de tomar un autobús hacia la capital.