Redacción – Mantener un pelo sano es la preocupación de la mayoría de las personas, por lo que aquí le recomendamos ocho técnicas para que luzca su cabello espectacular.

Alimentese bien

Comer sano es la forma de mejorar la salud de su pelo, ya que  si el organismo no recibe los nutrientes necesarios para mantener todo en equilibrio, va a priorizar la subsistencia del sistema inmunitario y del corazón por encima de la del cabello.

Y a largo plazo se pueden perder elementos esenciales que no le llegan. El hierro, las proteínas, la biotina, los ácidos grasos esenciales y las vitaminas A, D, C y E son imprescindibles para que el folículo produzca cabellos sanos, fuertes y brillantes.

Si no están presentes en tu dieta, puedes tomar suplementos.

Trate su cuero cabelludo como se merece

Mantener limpios los folículos de todo lo que se acumula en ellos (sudor, productos, champú seco) evita su bloqueo e inflamación, dos problemas que acaban dando lugar a pelos más finos e incluso a caída.

Use un champú clarificante una vez cada dos semanas y piensa en su cuero cabelludo cuando se lave el pelo (masajea con cuidado).

También es fundamental minimizar la tracción que ejerce sobre el anclaje del pelo: limita el uso de gomas y horquillas, y espera a que esté seco antes de empezar con las planchas. Si no tiene que eliminar tanta humedad, tardará menos en disciplinar cada mechón y no necesitarás aplicar tanta fuerza.

El frotar tiene que acabar

No necesita restregar el cuero cabelludo cuando apliques el champú, solo requiere un masaje emulsionador, ni tampoco friccionar el pelo con la toalla.

El cabello se debilita cuanto está mojado y esa fricción fuerte suele romper sus fibras.

Es importate que elimine el agua presionando con el tejido (use una camiseta vieja en lugar de una toalla porque es mucho más suave con las cutículas). Y aplica un revitalizador para que coja fuerza.

Cuidado si está mojado

El cabello es higroscópico, lo que significa que el agua no se queda en su superficie, es absorbida. Y cuando sucede, los enlaces naturales que unen las cadenas de queratina se rompen. Cuando se seca, se vuelven a unir. La pega es que, en el momento de la ruptura, cuando tienes el pelo mojado, el cabello se encuentra en su punto más débil.

No abuse del calor

Imaginamos que esto lo tiene muy claro, porque ya habrá comprobado que las planchas  dejan el pelo sin brillo.

Tampoco exagere con el secador. Si nota que la temperatura emana de su pelo, dele al aire frío y refresca durante al menos dos minutos. En los pasos previos ni se le ocurra saltar el acondicionador, porque actúa como un escudo contra el calor.

Preocúpese de cutículas y puntas

Son los dos elementos clave de un cabello envidiable y los primeros en sufrir daños. Las cutículas porque, cuando absorben la humedad, se hinchan y pueden llegar a romperse.

Por eso tiene que cerrarlas con productos para evitar el encrespamiento. Las puntas, porque al estar tan lejos de las glándulas sebáceas, acaban siempre deshidratadas. Y sin hidratación se rompen y se abren. Para que no avance hacia arriba, puede cortar por lo sano o aplicar un sellador de puntas.

Protejalo del sol

Igual que su piel, su pelo sufre las consecuencias de la acción de los rayos UV. En su caso, porque rompen y debilitan las proteínas capilares y modifican sus propiedades de elasticidad, tensión y pigmentado.

Sí, esos reflejos dorados que su melena consigue en la playa son síntomas de un debilitamiento de la queratina, porque los pigmentos actúan como filtros de los rayos UV y, según van desapareciendo, el cabello se aclara. Así que cuanto más rubio surfero luzca, menor capacidad de defensa tendrá. ¿La solución? Añade a su rutina un fotoprotector de cabello.

¡Date un respiro!

Tómese un descanso de todo. Del tinte, porque es un proceso oxidante que transforma la estructura de la fibra capilar. De planchas y secadores, porque por mucho que lo protejas, cuando superan los 250 ºC se daña la proteína del pelo de forma irreparable. Y de los lavados excesivos, porque no estás permitiendo que los lípidos del pelo cumplan su función nutritiva y los eliminas antes de que puedan repartirse por todo el cabello.