Redacción – Tras la balacera que se presentó el pasado 15 de mayo frente a un centro educativo en Escazú, y en la que un hombre libanés, identificado como Elías Akl -un reconocido traficante de armas y sospechoso de otros delitos- fue asesinado en lo que sería un posible ajuste de cuentas, el Organismo de Investigación Judicial (OIJ) informó que el pasado jueves fue retirado el cuerpo de la morgue judicial.

Fue la esposa del fallecido la que retiró el cuerpo del OIJ; sin embargo, la policía judicial desconoce por completo el paradero del cuerpo, y no cuentan con información sobre si fue sepultado en el país o si se solicitó su repatriación.

Por otro lado, en torno a la investigación, esta va a paso lento, aunque los indicios con los que cuenta el OIJ indican que se trataría de un ajusticiamiento.

Según una fuente cercana al caso, el ataque a Akl habría sido planeado fuera del país por los vínculos del fallecido con varias organizaciones criminales.

De momento se está a la espera de los resultados que arroje la investigación del caso.