Redacción – Tiger Woods, el golfista estadounidense que fuera número uno del mundo, fue arrestado en la madrugada del domingo al lunes por conducir bajo los efectos del alcohol, según recoge The Associated Press.

La detención se produjo, concretamente, a las 3 de la mañana (hora local) en la isla Júpiter, en Florida, donde el deportista de 41 años tiene su residencia.

La policía le arrestó y le trasladó al condado de Palm Beach. Allí entró sobre las siete de la mañana y unas tres horas después fue puesto en libertad.

La carrera de Woods no atraviesa su mejor momento. El pasado mes de febrero se retiró del Dubai Desert Classic por dolencias en la espalda. F

ue en abril cuando se sometió a una cirugía: «La operación fue bien, soy optimista», dijo entonces. «Cuando esté curado espero volver a una vida normal, jugar con mis hijos, competir profesionalmente y vivir sin el dolor contra el que he luchado durante tanto tiempo».