Redacción- El Concejo Municipal del cantón de La Unión de Cartago aprobó el uso de 70 pajas de agua para un proyecto de vivienda de interés social que beneficia a esa misma cantidad de vecinos de San Vicente y San Rafael luego de una ardua lucha que se inició en octubre del 2016.

Desde el año 2011 los pobladores de esas comunidades empezaron a realizar las gestiones para lograr una casa, pero los últimos meses el proceso se había entrabado debido a que los regidores negaban el permiso del uso de agua trámite sin el cual no se podía avanzar en las gestiones ante otras instituciones públicas.

El pasado 12 de setiembre la Comisión del Recurso Hídrico de la Municipalidad de La Unión aprobó -con una votación de 3 a 1- otorgar los permisos de uso de agua para las 70 familias en su mayoría integradas por mujeres jefas de hogar, adultos mayores, personas discapacitadas y matrimonios jóvenes.

La venia para el uso de esas pajas de agua consta en el Oficio MLU-506-2016 recomendación que se elevó el 16 de setiembre para el conocimiento y aprobación final por parte del Concejo Municipal. No obstante, los regidores tardaron seis meses en conceder los respectivos permisos luego de una presión constante de los beneficiarios.

En el informe 02-2017 de la Comisión del Recurso Hídrico de la Municipalidad de La Unión se dejó constancia de que .por votación unánime- esa instancia recomendó al Concejo aprobar el uso del agua para los vecinos.

Los datos de la misma Comisión indican que en la actualidad La Unión tiene 16 183 abonados al servicio de agua potable quienes demandan un caudal de 200 litros por segundo (LPS); sin embargo, el aforo total del líquido es de 245 LPS.

Proyecto social

El Regidor del Movimiento Libertario, Carlos Durán, señaló que este paso al frente beneficia a un grupo de ciudadanos de escasos recursos quienes ya suman siete años de gestiones para obtener una casa digna.

El grupo de familias que luchan por ese proyecto de vivienda de interés social está formando en una buena parte por matrimonios jóvenes, mujeres jefas de hogar, personas de la tercera edad e incluso ciudadanos con algún grado de discapacidad física.