Redacción- Algunas veces la justicia no parece ser tan evidente. Dominar la mayor parte del juego y crear más opciones, no fue suficiente para que el Real Madrid se alzara con los tres puntos ante su vecino, el Atlético de Madrid este sábado en el derbi madrileño.

Un empate que sabe amargo, pues faltando cinco minutos para el pitado final, Navas y compañía vieron escapar los tres puntos y tuvieron que conformarse con un punto.

En un juego en su mayoría dominado por los merengues, el primer tanto llegaría al minuto 52 por intermedio de Pepe quien después tendría que retirarse lesionado. En esta vez, el portugués abombó las redes por intermedio de un certero cabezazo tras el pase minucioso de Toni Kroos.

Los de Zidane con su once habitual y marcaron la cancha. Ante de la paridad al 85, Navas solo había sido intimidado tenuemente por dos remates de Griezmann y Saúl.

A pesar de ello, la justicia en el fútbol está en quien concreta los goles. No basta el juego bonito. No basta con el paradón para la foto. Lo único que basta es que el esférico cruce la linea de gol; y eso bastó para apagar la sonrisa de los blancos.

Al 85, Griezmann batió a Navas y fue suficiente para decretar el 1-1.

Con este punto amargo, los madridistas dejan ir tres puntos; mientras que para el Atlético, en medio de la adversidad, este punto sabe a gloria.