Redacción-  El cambio que experimentan los recién nacidos, al pasar de un ambiente líquido en el vientre a un ambiente aéreo externo, significa una alteración importante, que en un 10% no logra ser superada por los menores.

Debido a esto es de suma importancia que el personal médico que atiende el parto esté capacitado para reaccionar ante una situación de emergencia.

Según estadísticas del INEC, para el primer semestre del 2016, las defunciones neonatales, es decir, las ocurridas en los primeros 28 días de vida, constituyeron el 78,23% del total de defunciones de menores de un año.

Consciente de esto, la Universidad de Ciencias Médicas (UCIMED), reunirá a neonatólogos de Centroamérica, Panamá y República Dominicana, para capacitarlos sobre el Programa de Reanimación Neonatal.

Este programa consiste en un manual básico de atención en el parto, que ha sido exitoso a nivel mundial y que en 1999 fue incorporado al Programa de Educación Médica Continua de la CCSS. Incluso, desde hace 15 años, un decreto ejecutivo, obliga al personal que trabaja con recién nacidos a capacitarse bajo este curso para poder ejercer su labor.

En el primer semestre del 2016, la mortalidad infantil cerró en 8 muertes por cada mil nacimientos. Al compararlo con la tasa del año 2015 (8,43 por mil), presenta una disminución de 4,90%, es decir, de enero a junio ocurrieron 123 nacimientos y 15 defunciones infantiles menos que en el primer semestre de 2015.

En Costa Rica,  existen 62 instructores certificados para impartir la capacitación del Programa de Reanimación Neonatal del CENDEISSS  de la CCSS.