San José – La presidenta de Recope, Sara Salazar, entregó este miércoles la nueva convención colectiva de la entidad a las autoridades del Ministerio de Trabajo, la cual reduce por primera vez de 1969 los beneficios salariales de los empleados.

Ante esto, tanto las millonarias fiestas de los empleados, como las becas para los hijos de los empleados y otros privilegios fueron eliminados con la renegociación de la convención.

El ahorro estimado para el primer año es de ₡1.362 millones. Para el período 2017-2018 se ahorrarán ₡1.571 millones y del 2018 al 2019 se proyecta ahorrar ₡2.115 millones.

Además, se disminuyó el aporte patronal al Fondo de Ahorro y Préstamo de 10% a 8%, lo que representa un estimado de ₡717 millones anuales.

Además, se reducirá gradualmente en un plazo de 7 años el subsidio que le da la empresa al Fondo para los gastos administrativos, a razón de un 10% anual hasta eliminarlo por completo. Esto representará un gasto evitado de ₡1.249 millones durante la vigencia de esta convención colectiva y ₡1.561 millones por año una vez eliminado el subsidio.

“Lo que logramos es una Convención Colectiva consensuada que protege los derechos fundamentales de los trabajadores, pero que elimina las cláusulas abusivas y se enmarca dentro de la razonabilidad en el uso de los recursos públicos”, afirmó Sara Salazar, presidenta de Recope.

Una parte importante de la negociación se centró en la limitación de la intervención sindical en las decisiones administrativas de la empresa, referentes en su mayoría a los procesos de recursos humanos; sobre las cuales el Sindicato tenía injerencia por medio de su participación en la Junta de Relaciones Laborales, órgano bipartito característico de las empresas públicas para la atención de asuntos obrero-patronales.