Redacción- Aunque para la gran mayoría viajar siempre es un placer, pasar muchas horas en un avión no podría ser tan beneficioso como usted piensa.

La firma australiana Compare Travel Insurance publicó una serie de complicaciones y problemas a las que se exponen los pasajeros.

Entre ellas, el cansancio. El sitio asegura que es una de las principales molestias que expresan los viajeros.

  • Problemas para escuchar o saborear: La resequedad y los cambios en la presión, pueden afectar la capacidad para escuchar, las fosas nasales o incluso, el gusto por las cosas.
  • Al faltar el oxígeno, aparecen los mareos Al viajar a mayor altitud, tendremos menos oxígeno en la sangre y esto puede causar hiposa, una condición que provoca dolores de cabeza, mareos y fatiga.
  • Podría resfriarse con facilidad: En un avión, las probabilidades de contraer un resfrío son 100 veces más altas, pues la mitad del aire en la cabina re-circula durante el vuelo, expandiendo gérmenes y virus.
  • Deshidratación: Una persona puede perder hasta litro y medio de agua de su cuerpo en un vuelo de tres horas. ¿Por qué? Los niveles de humedad en un vuelo son menores y por ende muchas membranas mucosas se resecan, en particular, la garganta, la nariz y la boca.
  • El cuerpo pude expandirse Debido a los cambios de la presión del aire, nuestro organismo puede experimentar dolores estomacales e hinchazón.
  • Concentración de sangre en las piernas. La falta de movimiento lleva a que la sangre se mantenga en ciertas áreas cuerpo, aumentando el riesgo de sufrir padecimientos como trombosis profunda.

Por eso, si va de viaje, el sitio recomienda, ingerir mucha agua –ojalá embotellada pues la que sirven en el avión puede estar cargada de gérmenes- y utilizar gotas para los ojos.

Asimismo, trate de caminar en el pasillo del avión cada cierto tiempo para evitar la hinchazon en las piernas.

Recuerde tener en cuenta estas recomendaciones para evitar inconvenientes a la hora de viajar.