San José- Lo normal sería que un ministro de obras públicas y transportes se mantuviera 4 años en su cargo, sin embargo, esa norma no se cumple en nuestro país.

El último jerarca en permanecer los 4 años de una administración, fue Rodolfo Méndez Mata en el gobierno de Rodrigo Carazo (1978-1982).

Desde entonces, en 38 años, el Ministerio de Obras Públicas y Transportes (MOPT) tuvo en promedio 2 ministros, convirtiéndose en toda una odisea para 10 gobiernos distintos.

Para el ex ministro, Rodolfo Méndez, muchas veces, la inestabilidad del ministro de transportes, se da en la segregación que tiene el MOPT a lo interno: los consejos tanto de vialidad o de seguridad vial no permiten una coordinación adecuada.

«Hay una problemática: las instituciones responden por sí mismas. Además en el MOPT ha llegado mucha gente con buena intención y capacidad profesional en otros campos, es decir, sin la visión de jerarca de transportes» apuntó Méndez.

Por citar algunos ejemplos, en primer gobierno de Oscar Arias (1986-1990) Guillermo Constenla y Luis Llach mientras que en su segunda administración (2006-2010) Karla González, Marco Vargas y Francisco Jiménez.

Abel Pacheco (2006-2010) tuvo 3 ministros: Javier Chavez, Ovidio Pacheco y Randall Quirós tomaron las riendas del MOPT.

En la administración actual, también con la llegada de Carlos Villalta, suman 2 los jerarcas de transportes.

Para Luis Guillermo Loría, ingeniero del LANAMME, los mandos medios en el MOPT muchas veces son la principal complicación.

«Yo siendo ministro me enfocaría en las unidades ejecutoras que hay. Las pondría a trabajar y no me complicaría con las trabas y zancadillas que uno sabe que ocurren a lo interno» manifestó Loría.

En los gobiernos de Arias, Pacheco y Chinchilla fueron los que acumularon más salidas del MOPT, pues en esas 3 administraciones, pasaron 11 jerarcas.